Contratar personal joven no es sinónimo de holgazanería e improductividad, al contrario, trae consigo ideas nuevas, frescas que aportan a los clásicos estándares organizacionales, permitiéndoles evolucionar y entender el público actual.

Contratar personal joven no es sinónimo de holgazanería e improductividad, al contrario, trae consigo ideas nuevas, frescas que aportan a los clásicos estándares organizacionales, permitiéndoles evolucionar y entender el público actual.
Los millennials o también la llamada generación Y han generado un cambio importante en el mercado laboral.