El Telescopio Espacial James Webb JWST ha revelado la presencia de moléculas orgánicas complejas, similares al humo o al smog, en una galaxia distante que se formó cuando el universo era joven.
Estas moléculas, conocidas como hidrocarburos aromáticos policíclicos, son similares a las que se encuentran en el petróleo, el carbón y el smog terrestres.
A diferencia de las moléculas simples como el agua o el dióxido de carbono, estas moléculas son grandes y flexibles, con docenas o cientos de átomos en ellas.
Estas moléculas orgánicas complejas son comunes en el espacio y su estudio puede proporcionar información sobre la actividad dentro de las galaxias.
Sin embargo, detectar estas moléculas en galaxias distantes y tempranas ha sido un desafío debido a las limitaciones de los telescopios en términos de sensibilidad y rango de longitudes de onda.
Gracias al Telescopio Espacial James Webb JWST, los astrónomos han logrado detectar estas moléculas en una galaxia llamada SPT0418-47, ubicada a más de 12 mil millones de años luz de la Tierra.
Es notable que estas moléculas se hayan formado tan rápidamente después del Big Bang. El descubrimiento se realizó utilizando la técnica de lente gravitacional, que permite amplificar la luz de galaxias distantes para su estudio detallado.
¿De qué trata el estudio del JWST y las moléculas orgánicas complejas?
El estudio con el JWST ha superado el récord anterior de detección de moléculas orgánicas complejas en galaxias antiguas.
Además, el telescopio ha proporcionado una resolución que permite localizar las moléculas dentro de la galaxia en lugar de simplemente confirmar su presencia. Sin embargo, la distribución no uniforme de estas moléculas en SPT0418-47 aún no tiene una explicación clara.
Los resultados también desafían la idea anterior de que estas moléculas estaban relacionadas exclusivamente con la formación estelar.
El estudio encontró regiones con moléculas orgánicas complejas pero sin formación estelar, así como áreas con formación estelar pero sin presencia de estas moléculas.
Estos hallazgos sugieren que la formación de galaxias puede ser más rápida de lo esperado y que existe una rica química en el espacio que permite la producción de moléculas complejas.
A pesar de estos emocionantes resultados, hay preocupaciones sobre el rendimiento del instrumento de infrarrojo medio MIRI del JWST. Si el rendimiento continúa deteriorándose, futuros estudios como este podrían volverse imposibles después del próximo año.
El descubrimiento de moléculas orgánicas complejas en galaxias distantes y jóvenes es un logro importante y prometedor. Los astrónomos esperan seguir investigando galaxias aún más distantes y jóvenes para comprender mejor la formación y evolución de estas moléculas en el universo.
Con información de Space.
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