El atajo de teclado Win+C ha sido vinculado a algunas de las funciones menos exitosas de Windows. Microsoft está enfocando sus esfuerzos en el nuevo PC Copilot+, pero esta herramienta solo estará disponible para una minoría de usuarios debido a los exigentes requisitos de hardware: 16 GB de RAM, al menos 256 GB de almacenamiento y una unidad de procesamiento neuronal (NPU) rápida.
Esto excluye a la mayoría de las PC actuales con Windows 11.
Copilot y los nuevos cambios
El chatbot Copilot sigue siendo compatible con todas las PC con Windows 11 y la mayoría de las PC con Windows 10.
No obstante, en las versiones recientes de Windows 11 Insider Preview, Microsoft ha implementado cambios que afectan su accesibilidad. Copilot ha pasado de ser una barra lateral persistente a una ventana de aplicación que se puede redimensionar, minimizar y anclar en la barra de tareas.
Sin embargo, ya no es posible ajustar la configuración de Windows ni invocar Copilot con el atajo de teclado Win+C.
Solo los teclados más nuevos con una tecla dedicada a Copilot tendrán un atajo integrado para activar esta función.
Un historial de fracasos
Si Microsoft mantiene estos cambios, llegarán a las PC con Windows 11 con la actualización 24H2 a finales de este año.
Aunque Copilot se considera una “vista previa” hasta esta actualización, eliminar el atajo Win+C parece innecesario, especialmente porque no se está reasignando a ninguna otra función.
Los usuarios que deseen seguir utilizando Win+C pueden hacerlo mediante reasignadores de teclado personalizados, como el Keyboard Manager PowerToy de Microsoft.
Recorrido accidentado de Win+C de Windows
El atajo Win+C tiene una historia accidentada.
En Windows 8, se usaba para abrir el menú “Charms”, una característica de la interfaz orientada a tabletas que nunca despegó.
En Windows 10, Win+C se reasignó al asistente de voz Cortana, que también fracasó y fue descontinuado en 2023. Incluso en la era de Windows 95, se podía usar Win+C para abrir el Panel de control si se instalaba el software IntelliType.
Así que despedimos a Win+C, el atajo de teclado que siempre intenta encontrar su lugar sin lograrlo. Quedamos a la espera de ver qué novedades traerá en el futuro.
Con información de Ars Technica.
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